Has cumplido cuatrocientos partidos como jugador senior, pero empecemos por el principio, ¿cuando empiezas a jugar y por que empiezas a jugar?

Empiezo a jugar con 9 años, en tercero de EGB. Y empiezo a jugar por una mala experiencia en un partido de fútbol sala, yo era portero. Después de hacer una cagada en un partido, el abuelo de uno de mi equipo me pego un muletazo. Al entrenamiento siguiente llevé el equipaje, y como mi hermano entrenaba a los de quinto pues empecé a entrenar con ellos. Había un chico que de vez en cuando faltaba los fines de semana, porque se iba a esquiar, y yo me hacia pasar por él. Así conseguí jugar un par de partidos.

Entonces siendo de tercero de EGB jugabas con los de quinto, ¿pero tu primer año real de competición fue?

Fue al año siguiente, que ya empecé a jugar. Había un tornero interno en el colegio en el que luego hacían como una especia de selección, el día de la selección había algo más de treinta, y al final nos quedamos doce. Y ahí empecé ya a competir.

Como fue esa primera experiencia en un equipo, era en edad premini, ¿que recuerdos guardas de ese año?

Recuerdo mi primer partido, en el que supuestamente no teníamos mal equipo. Algunos ya habíamos jugado, y fuimos a Durango al primer partido de liga. Nos ganaron de cuarenta en “el establo” de Jesuitas. Nosotros nos quejábamos por que las canastas entraban y luego salían, y como no atravesaban la red no valían… Sin embargo luego a la vuelta les conseguimos ganar, lo que no sabíamos es que el primer partido nos enfrentábamos a los mejores y nos jugábamos el campeonato de liga y finalmente quedamos terceros por un sólo punto de diferencia.

En esa época ¿en quien te fijabas como jugador?, cual era tu referencia dentro del colegio, dentro del club.

Dentro del colegio recuerdo ir a ver los partidos de mi hermano. Y no sé porque, pero cuando todos se fijaban en Magic, en Jordan, a mí me gustaba Scottie Pipen.

No era mala elección…

No era mala elección no, pero es como si siempre me hubiera gustado el jugador secundario, Es un rol menos agradecido, pero para mí, el clave.

Entonces comienzas a subir de categoría, y llegas a federado, dejas el escolar, el todos juegan, y empieza la seriedad del federado, árbitros federados, otros planteamientos, ¿Cómo se vive ese cambio?

Para mí el cambio además fue más significativo, porque yo había tenido problemas de crecederas y cogí muchísimos kilos. Le empecé a dar al chocolate, al pan bimbo y a los bocatas y coca-colas para merendar. Y en el paso a federado tuve un entrenador, muy amigo de mi hermano, que me dijo la siguiente frase que nunca se me va a olvidar: “por mucho que seas el hermano de Javi, eso no te garantiza que el año que viene sigas jugando”. Eso me hizo cambiar el chip, empecé a esforzarme mas, empecé a adelgazar, empecé a crecer, y en cadete empecé a notar ese salto respecto al escolar.

La seriedad del juego…

La seriedad del juego y que había que entender el deporte de otra manera. Es un equipo. Dependes de los demás.
¿En que posición jugabas en aquella época?
De escolta-alero, de base he jugado muy poquito.

Vas subiendo poco a poco, llegas a senior, ¿cuando juegas en senior? ¿Subes antes, vas al segundo equipo?
Jugué mis primeros partidos en senior siendo junior de primer año. Jugué dos o tres partidos y fui convocado porque el equipo de Primera coincidía con el junior. Entonces como no podían ir los junior de segundo año, a un par de partidos fui convocado. El siguiente año fui más asiduamente. Y cuando nosotros dimos el paso a senior fue cuando se creó el segundo equipo. Salí con ficha en segunda, e iba convocado a los partidos de primera. El salto era tremendo, yo venía de juveniles de hacer una buena temporada a nivel personal, y en el equipo de regional de primera no jugaba prácticamente un minuto. Y cuando salía era porque ganábamos de 20, de 30,... y me dejaban jugar 3 minutos.

Ahí la competición cambia, ya no es formación, ya se intenta ganar, y ahí se empiezan a notar las carencias y las virtudes…
Claro, sobre todo por que empiezas a jugar contra gente que es más fuerte, mucho más grande que tu, mas mayor…

¿Tienes algún recuerdo de cómo te recibe esa gente mayor?
La verdad es que a la mayoría les conocía bien o les había visto jugar. Era gente uno, dos, cinco años mas mayor que yo. Y luego el mas mayor, era amigo de mi hermano, por lo que en ese sentido era mas fácil. Además ese año era Javi el entrenador del regional, por lo que seguramente al ser el hermano del entrenador, tuve un trato…menos hostil. Pero guardo un buen recuerdo del trato.

¿Como se lleva el hecho de que te entrene tu hermano?¿hay alguna diferencia?
Si. Que te chillan mas. Tiene mas confianza contigo, evidentemente. Al principio se lleva bastante mal, sobretodo en cadetes, juveniles. Con los que había estado en cadetes jugaban un poco menos, y en alguna ocasión si que intuí que se quejaban de que yo jugaba porque era el hermano del entrenador. Era algo que no me molestaba sobremanera, ya que me hacia esforzarme mas por darle la razón a mi hermano. Y a largo plazo, supongo que me ha venido bien, porque estoy convencido de que he tenido mas oportunidades que los demás. Y además me ha ayudado a ser mejor jugador.

Entonces en senior, llegas a más de 400 partidos

Del Primer equipo, en el segundo he jugado muchos mas y también estuve media temporada en Leioa.

¿Cuantos años son en total en senior como jugador?

En senior esta es la decimoctava temporada. Dieciocho años.

Habrá habido de todo, desde partidos buenos a partidos malos, ¿cuál sería el mejor recuerdo que te viene a la cabeza?

Pues el mejor recuerdo, mas que por un partido en concreto, yo creo que es por temporadas. Al final, a lo largo de una temporada siempre haces partidos muy buenos, partidos muy malos y partidos horrorosos. Pero cuando uno se siente a gusto realmente es cuando termina una temporada y valoras lo que has conseguido esa temporada.
Probablemente una de las temporadas de la que mas orgulloso me sienta, es la del año pasado. Conseguimos salvarnos después de dos años prácticamente quedando últimos. En que ha habido un cambio generacional tremendo. Y en el que prácticamente nos hemos quedado tres jugadores, quizás cuatro, de los que participamos en la época en la que jugamos en primera división, que estuvimos muy cerca de subir a EBA. Teníamos muy buen equipo. Entonces, el liderar ese cambio y ver que hay gente joven que otra vez tiene futuro, que tiene cualidades para jugar a esto, y que entiende el deporte de otra manera. Y que además les estas enseñando. Produce una enorme satisfacción. Demostrar a la gente que ha jugado en el equipo, que sin ellos el club también puede y debe funcionar, y que también funcionará sin mí. Que el proyecto siga adelante es lo importante. Y la satisfacción de haber ayudado a liderar ese cambio es grande.

Es decir, se puede tener un buen recuerdo de una temporada en la que no se ha estado en los puestos de arriba., ni se ha hecho una gran temporada desde un punto de vista resultadista.

SI, de hecho el año pasado quedamos decimos u onceavos. Pero nadie daba un duro por nosotros.

Lo que hemos conseguido, es que haya gente de dieciocho, diecinueve, veinte años, que no se frustre y siga jugando a baloncesto, que es lo que no nos ha estado pasando los años anteriores. Creo que el gran problema del baloncesto en estos momentos en edad adulta, es que los buenos jugadores no logran seguir jugando desde los dieciocho a los veintidós años, abandonan el jugar en esa época. Y abandonan porque todavía no entiendes el deporte en todo su conjunto y en toda su variedad, y al final eso te frustra. Pero eso solo lo ganas con los años.

¿Te has planteado alguna vez dejar de jugar? Cuando empiezas a trabajar, cuando te casas, hay momentos en la vida en los que uno tiene que empezar a decidir y el baloncesto ocupa un espacio muy importante.

Yo el día en el que decidí seguir jugando a baloncesto hasta que pueda, ha sido después de preguntar a varios entrenadores de ACB. Y yo siempre les hago una pregunta, ¿Qué es lo que mas se arrepienten a lo largo de su carrera baloncestística? Y todos me han dicho, “dejar de jugar por dedicarme a entrenar”.

Una de las cosas que me gusta es escuchar a la gente mayor, y hacerles caso en la medida de lo posible, y como ya me han dicho varias personas y además personas que han llegado a ser lo máximo prácticamente en el baloncesto nacional, creo que es suficiente para hacerles caso.

A seguir jugando hasta que el cuerpo aguante, entonces no tienes muchas dudas en ese sentido.

De momento no.

Son dieciocho años en senior jugando, ¿las expectativas a donde llegan?

De momento hasta que el cuerpo aguante. Si puedo seguir jugando al baloncesto es porque no he tenido lesiones graves que me lo hayan impedido. Estoy convencido de que muchísima gente seguiría jugando si no fuese por esas lesiones. Y como he visto muchas cosas a lo largo de mi vida, porque son muchos años jugando, una de las cosas que quiero hacer es eso, mientras mi cuerpo me lo respete seguir jugando a este deporte.

¿Tienes alguna manía, algún ritual antes de los partidos?

Yo si no voy al wáter antes de los partidos no puedo jugar a gusto.

¿Y después de los partidos? ¿Cómo te liberas, como te desintoxicas de la tensión de los partidos? Tanto antes como después.

Como jugador jugando, lo que quiero es saltar a la cancha y jugar. Como entrenador dando la sensación de que tengo la situación controlada.

Dando la sensación hacia fuera…

Si, seguramente tienes las cosas claras y sabes lo que quieres, quizá en algún momento te sientes nervioso, pero la gente no tiene por qué notarlo.

¿Y después de los partidos? Esa tensión añadida que la gente desde fuera no vive pero que es una tensión importantísima que nos afecta a todos. ¿Como te liberas de eso? En quien te apoyas?

Por lo general ahora, lo paga mi mujer, antes quizás mi hermano Javi, y probablemente mis padres. La forma para desquitarme, creo que después de un partido en el que estas cabreado, lo mejor es salir con los amigos y pasarlo bien. Normalmente te acabas encontrando con algunos de otro equipo, con los que también acabas tomando copas… Y sino preguntale al Boss de Ibaizabal.

Compaginas el ser jugador, con ser entrenador, con ser directivo, y además con trabajo, ¿Cómo se lleva todo eso?

Y con una mujer y una hija de dos años. ¿Cómo se lleva? Organizando muy bien el tiempo.

Hace tiempo nos dimos cuenta los jugadores senior de que era inútil entrenar 3 días. A veces veníamos 7, otras 6, a veces nos juntábamos para hacer un cinco por cinco. Temas laborales y de estudios. Así que nos comprometimos a venir dos días a la semana, dos horas cada día. Así entrenábamos las mismas horas y además podíamos preparar mejor los partidos. El entrenar dos días con el senior, me deja organizarme mejor dentro del club, con los juveniles hago coincidir los días de entrenamiento y al final tengo la suerte de trabajar de 8 a 15. Aunque muchas tardes también trabajo, me organizo las tardes para estar con mi mujer y mi hija y hacer lo que me gusta. Y los fines de semana intento sacar un rato para ver a los amigos.

¿Cómo funciona tu cabeza para ser entrenador, jugador y directivo del mismo club?, porque te vendrán problemas de muchos sitios…

Por todas partes. Es una figura muy habitual, por desgracia. No es fácil, si estoy en la directiva pues probablemente…bueno yo creo que en todo lo que estoy haciendo influye mucho mi hermano. Javi ha sido jugador, entrenador, y por diversas razones se tuvo que hacer cargo de la coordinación y dirección, montando otra vez el club prácticamente desde cero. Y esto me lleva a una cuestión y es, ¿que pasara el día que Javi deje? El club hubiera desaparecido hace cinco o seis años si Javi lo hubiera dejado. Entonces lo que hemos hecho es crear una estructura de club en la cual tenemos un presidente con unas capacidades importantísimas. Un tío implicado, que ha dejado su hijo de jugar y sigue ahí al pie del cañón. Y que probablemente sea la persona que más le ha ayudado a Javi en la gestión. Y que si tenemos una situación como la que tenemos hoy en día es gracias a ellos dos, en gran parte. Y los otros 5-6 directivos, como nos hemos dado cuenta de que el día que Javi deje esto podría desaparecer, nos hemos involucrado más en el club, en la coordinación, en la dirección,... Y que esto siga adelante el día que estas personas lo dejen.

Al final es un proyecto que lleva ya casi treinta años, y creemos que es un proyecto que debe perdurar en el tiempo por encima de las personas. Entonces nos tenemos que ayudar entre todos.

¿Que representa Berrio Otxoa para ti?

Al final he estudiado en este colegio, la cría ha empezado a estudiar este año. Al final he pasado más horas aquí, o las mismas, que en mi casa. Entre estudiando y con el balón en las manos… Buff, no quiero hacer el cálculo.

Respetando que hay masculino, femenino y que esto es muy grande habiendo muchas y distintas formas de hacer, ¿Como ves en general el baloncesto amateur bizkaino? Siendo una persona con experiencia, que ha vivido la evolución del baloncesto, ¿a donde ves que puede evolucionar esto?

El baloncesto ha evolucionado mucho en los últimos diez años sobre todo, evoluciona mucho mas si te vas más atrás. Uno de mis primeros recuerdos del baloncesto es el primer VHS que tengo. Era la final de Argentina 90 entre la antigua Yugoslavia y la ya comunidad CEI, la extinta URSS. Ese partido lo llevamos en un viaje de esa famosa temporada que casi subimos a EBA, y recuerdo que muchos tenían muchas ganas de ver ese partido. Sobretodo Dani del Pozo. Vimos el partido y nos llevamos todos una desilusión tremenda, porque jugaban andando. Entonces, el Baloncesto desde hace veinte años ha sufrido una evolución tremenda. Pero en los últimos diez ha pegado un cambio mayor. Se ha convertido en un deporte muy físico en comparación con lo que era antes. No importan tanto la técnica, que se ha dejado un poco de lado. Ahora importa que seas muy grande o que seas muy intenso, explosivo. Sobre todo que seas muy intenso. Yo, los partidos que jugué en autonómica hace diez años a los que estoy jugando ahora no tienen nada que ver, ahora la intensidad de los partidos es tremenda. Una de las cosas que le dije a Javi para seguir jugando es que yo puedo seguir jugando, pero no puedo seguir jugando treinta minutos por partido. Y físicamente no me encuentro mal, pero el juego no te permite jugar a esa intensidad tantos minutos.

¿Ves al baloncesto bizkaino bien en esa dinámica, bien orientado en esa línea con esta nueva camada de jugadores que han salido de juveniles?¿ les ves jugando en ACB por ejemplo?

Les queda mucho tiempo para llegar a niveles altos, tienen que vivir muchas experiencias. Se tienen que curtir cuatro o cinco años en equipo de LEB Plata, EBA, incluso Primera División. Destacar en estas ligas si algún día quieren jugar en ACB. Y eso es un proceso que hay que aprender. Y la mayoría de jugadores quiere estar en ACB con 18 años y cobrar. Eso no es posible si no eres Ricky Rubio.

A los jugadores que empiezan ahora, o que acaban de dar el salto hacia federados, hacia el senior, no ya los que puedan llegar a la elite, sino los que van a acabar jugando en competiciones domésticas, ¿te gustaría mandarles un mensaje?

Que sigan trabajando, y que sigan jugando. Yo estoy empezando a comprender el deporte ahora, y tengo ya 34 años. Casi 35. Nunca se termina de aprender, hay que ir poco a poco. Cada día aprendo más.

Y sobre ZONABIZKAINA, ¿que opinión tienes?
Creo que es algo que era necesario, porque, la única forma que teníamos de ver cosas sobre nuestro baloncesto era la página oficial de la federación, entonces está bien un foro donde la gente pueda participar un poco más, se amenos oficial y animaros a sigáis haciendo vuestro trabajo.

¿Te gustaría añadir algo mas?

Querría decir, que la cosa más grande que tiene el baloncesto es toda la gente que me ha permitido conocer. He viajado por muchas partes del mundo, la mayoría han sido de gente bien que ha jugado conmigo o que he conocido a raíz del baloncesto. He podido estar en sus casa, he podido disfrutar de esos lugares de otra forma. Incluso por culpa de ese partido VHS, en Australia me hice muy amigo de un esloveno que luego ha estado en mi casa, porque alucinaba que me supiese toda la plantilla de esa Yugoslavia de memoria. Le pareció espectacular y es un periodista de la televisión eslovena que estaba allí haciendo submarinismo. Este verano he estado en una boda en Islandia, de un jugador islandés que estuvo con nosotros jugando hace tres años. Ahora tenemos un canario, un vitoriano, un navarro. Hemos tenido entrenado a unos alemanes también. Al final, las experiencias de haber jugado contra gente que esta en ACB, incluso a algunos haberles ganado… Mis amigos son los que jugaban conmigo. Es mi vida. Y eso es lo que tengo guardado en la mochila. Las historias que contaré cuando sea viejo.