Jon Gascón UNA VIDA DEDICADA AL BALONCESTO BIZKAINO

JON GASCON LARREA (Bilbao 1982)
¿A qué edad y por qué empezaste a jugar a baloncesto?
Pues empecé a jugar con 7-8 años, estaba en 2º de Primaria y entrenaba con los de 4º durante el año, al final de temporada me dejaron jugar un partido con ellos. La razón por la que jugué a basket era porque disfrutaba mucho y por seguir los pasos de mi hermano Ander.
¿Cuántas temporadas jugando y donde?
Pues he jugado hasta los 32 años, así que calcula jejejeje. Toda mi carrera deportiva se puede decir que la he desarrollado en Askartza, exceptuando los años de Bilbao Basket, Santurtzi y La Salle. Estando en Askartza surgió alguna posibilidad de jugar fuera de la provincia pero preferí quedarme en el cole, donde iba a estar mejor que en casa y con mis amigos. Creo que el hecho de permanecer al mismo club durante la carrera deportiva es algo que se está perdiendo, se ha perdido la identificación. Esto es algo que he comentado con mucha gente, antes ibas a jugar contra un equipo y podías decir la plantilla de carrerilla, hoy en día es un lujo.
¿Cuál es tu primer recuerdo como jugador?
Mi primer recuerdo como jugador es de aquel partido con los de 4º de primaria, lo recuerdo perfectamente. Era mayo y hacía mucho calor, jugábamos en el patio y me acuerdo que corría hacia todos los sitios sin parar siguiendo el balón. Me lo pase como un enano que es lo que era jejejeje También recuerdo el bocata de tortilla de después del partido con mi aita en la café, un clásico.
Creo que mi familia, con mención especial para mi aita, ama y mi hermano Ander ha tenido mucho que ver en mi educación deportiva y desde aquí se lo quiero agradecer. Me han ayudado siempre a estar en mi sitio y en los malos momentos.
Posición de juego, ¿siempre has jugado en esa posición?
Siempre de base excepto el último año que me toco también jugar de escolta. De pequeño era de los “altos” pero como ya sabían que me quedaría pequeño me pusieron siempre subiendo el balón.
¿Qué recuerdo guardas de los primeros entrenadores que tuviste?
Guardo un gran recuerdo de todos los entrenadores que he tenido. Se esforzaban muchísimo porque cada día fuéramos mejores jugadores y nos divirtiéramos, eso se notaba. Sin embargo ahora… tengo la sensación de que la figura del entrenador esta mas en entredicho o no se valora tanto como antes. Nunca se ha de olvidar que los entrenadores dedican su tiempo libre a enseñar a los chavales, con su mejor empeño y hay que valorarlo y reconocerlo como se debe. ¡Eskerrik asko coachs!
Y tras esos años en escolar, das el salto a federado, ya no son los aitas los que arbitran, ya hay árbitros de naranja, en pabellones, ¿Cómo se vive ese salto?
Pues como algo natural, es algo que llevas tiempo viendo y es un momento que deseas que llegue. Quizá el primer año de cadete es el más complicado por el que te puedan cambiar y al principio cuesta pero nada más.
¿Jugaste en alguna categoría superior sin tener la edad?
Esos primeros años de basket que en el cole se empezaba a jugar en 4º de primaria, y después en mi etapa juvenil cuando tocaba ir con los mayores se iba con mucha ilusión aunque al final no jugase. Recuerdo con toda claridad como desayunando un sábado a las 9 de la mañana y siendo jugador cadete me llamó el entrenador del equipo juvenil para que estuviese a las 10 en la cancha porque me necesitaban. No hubo que pensar nada allí me presente para estar con los mayores, jugar o no jugar era secundario.
¿Has doblado partidos con un equipo de categoría superior? ¿Y entrenos?
Partidos desde cadetes creo que he doblado la mayoría de fines de semana, y fuera con la selección o con otro equipo del club. Había fines de semana que podía llegar a jugar hasta tres partidos. Entrenamientos solo he doblado en edad junior los viernes que solíamos ir después de nuestro entreno con el regional o el nacional.
¿Qué es Askartza en la vida de Jon?
Esta es una pregunta un poco profunda… jeje piensa que he pasado por casi todos los espacios posibles, creo que solo me ha faltado… ¡ser presidente! Jejeje Askartza es el club donde me he formado no solo como jugador sino como persona, lo que es más importante. Para mí es como mi segunda casa, le estoy profundamente agradecido al club por los momentos que he podido vivir y sobre todo por las personas que me ha permitido conocer, muchos de ellos grandes amigos hoy en día. Ese es uno de los aspectos que Askartza me ha enseñado y que más he valorado siempre: dar la importancia a las personas, y no a los egos personales, creerse más que los demás o colgarse medallas y me alegro de que los jugadores del club sigan teniendo esos valores igual de presentes en la actualidad.
¿Qué ritual solías seguir antes de los partidos?
Para ser sinceros, nunca he sido de manías. Si decir que siempre estaba pendiente hasta antes de salir al campo, si mi familia o mi mujer me venían a ver, no me digas porque pero me transmitía seguridad.
¿Cuál ha sido el mejor momento como jugador?
Quedarme con un solo momento es bastante difícil… afortunadamente durante mi carrera deportiva he podido disfrutar de ganar campeonatos, ascensos de categoría tengo un gran recuerdo de la vez que quedamos campeones mini de Bizkaia que ganamos sin que nadie lo esperara o los partidos que pude jugar con mi hermano y por último el homenaje que me hicieron antiguos compañeros con los que había compartido pista.
¿Dónde y cómo fue?
Como no, fue en Askartza y para mí es el resumen de mi vida como jugador de basket. Estuve rodeado de gente que ha compartido momentos conmigo, algunos de ellos desde que teníamos 7 añitos. ¡Eskerrik asko a todos los que lo organizasteis y tomasteis parte en ello!
¿Y el peor?
El peor momento como jugador o mejor dicho el más duro lo pasé el año que estuve con Bilbao Basket vinculado al Santurtzi. Fue un gran cambió para mí, ya que eres joven cambias de un entorno en el que todo te va de cara a uno en el que no disfrutas de minutos… y eso te hace pasar malas rachas. Aún así, he de decir que creo que fue el año que mas crecí como jugador. Pude aprender muchísimo de la gente que me rodeaba, compañeros y entrenadores, me ayudó a ser mentalmente más fuerte y a tirar para adelante cuando las cosas vienen mal dadas.
¿Con quién te “confesabas” cuando el triple ganador no había entrado, o el equipo no iba bien?
En esos primeros años escolares con mi familia, ellos siempre tenían palabras de apoyo para mí si es que me veían disgustado. Ya en federados con los compañeros de equipo: Mikel, Togo, Richard, Sisti, Txus… te podría decir tantos jejeje
¿Entrenas o te ves entrenando?
Entreno y me veo entrenado mientras me siga divirtiendo. Para los que ya no saltamos a jugar a la cancha es una manera de quitar el “mono”, devolver lo que el basket te ha dado durante años y ayudar a los más jóvenes.
¿Cuándo no estabas entrenando o jugando que solías hacer?
Eso era difícil…. Jejeje Lo primero estudiar y después lo típico, pasar tiempo con la cuadrilla, familia y con mi novia que ahora es mi mujer.
¿Cómo compaginabas todo?
La clave es organizarse bien, porque hay tiempo para todo. Si lo planificas, estudios, baloncesto y vida social son más que compatibles, solo hace falta proponérselo y querer hacerlo. Nunca he faltado a entrenar o jugar por tener que estudiar. Hay tiempo para todo si te organizas y eres constante.
Para ese jugador que está empezando a dar sus pasos en el baloncesto federado, ¿Que es lo más importante que debe hacer para llegar a ser una buen jugador de baloncesto?
Lo primero que se necesita y lo tengo muy claro es ACTITUD. Querer entrenar y dar el 100% todos los días, en entrenos y partidos, no buscar excusas a los problemas y si soluciones. Eso es para mí lo más importante. Después si a la actitud le acompaña el talento todo es más fácil.
Tu para llegar hasta donde has llegado, ¿Cuantos sacrificios has tenido que hacer?
Hay momentos en los que tienes que elegir entre cosas que te gustarían hacer y el basket, y eso es muy complicado. Irte de fin de semana con la novia o la familia, salir con los amigos o tener que pasar el fin de semana fuera de casa pueden ser algunos de ellos.
¿Merece la pena?
En mi opinión sí, son momentos inolvidables que van a formar parte de tu vida. Si en algún momento hubiera pensado que no me compensara no lo hubiera hecho. Sí que hay situaciones en las que tienes dudas de si has hecho lo correcto, pero echando la vista atrás, a mí por lo menos me ha merecido la pena.
Y para acabar, ¿Cuál es tu opinión sobre Zona Bizkaina?
Me parece un espacio interesante y muy necesario. Era algo que se echaba de menos y que gracias a todos los que formáis parte del proyecto sacáis adelante. Eskerrik asko por tenernos informados de nuestro basket.