Argazkia: Martina Miser-La Voz de Galicia

Se estrenaban las de Nahi Monge en las gallegas tierras de Villagarcía de Arousa, midiéndose a un Mariscos Antón Cortegada que abría el marcador con un tiro libre de Aminata Traore. Más de dos minutos tuvimos que esperar para celebrar la primera canasta galdakoztarra de la temporada, que vino desde fuera de la línea de tres puntos y llegó de la mano de la especialista Araia Peña.

No encontraban las nuestras fluidez ofensiva, sin poder contrarrestar el despliegue físico con el que saltó a la cancha el conjunto gallego, que lo aprovechaba para poner tierra de por medio y obligando a Monge a parar el partido con el 17-5 tras el triple de la local Loureiro.

Ibaizabal conseguía mantenerse en esa distancia de doce puntos tras el tiempo muerto, controlando las acciones villagarcianas y encontrando algunas vías de anotación para no perderle la cara al partido.
Pese a ello, el tiempo pasaba y las locales se mantenían cómodas en pista, controlando el rebote defensivo y llegando a disponer de una máxima diferencia de 16 puntos con el 33-17. Un triple de Peña y una posterior canasta de Iruskieta inquietaron a las locales, que pararon el partido para ajustar su juego para irse al descanso con un favorable 39-22, con 12 puntos de Traore.

Pasaban las jugadoras por el túnel de vestuarios para atender a las indicaciones de sus cuerpos técnicos, volviendo a pista con energías e ideas renovadas por ambos planteles. Las de Galdakao, apremiadas por el marcador, lograron un parcial de 0-8 en el primer minuto y medio de asalto, con dos triples de Peña y la inaugural canasta de Condom. Tenía que parar el partido Cortegada, que fiaba su primer balón a Traore para que les encaminase de nuevo a la senda de la anotación. No frenó esto el ímpetu de las verdes, llegando a colocarse a cuatro puntos tras un tiro libre de Naia Sarasua. Tres puntos locales nos mandaban al inicio del cuarto final con el 48-41.

Subía la intensidad defensiva el cuadro local, que mantuvo a Ibaizabal durante casi cinco minutos sin conseguir anotar, notando las nuestras el esfuerzo realizado en el cuarto anterior. Aprovechaban las gallegas este lapso de tiempo para volver a poner tierra de por medio, superando la decena para poder tomar un respiro de cara a los minutos finales del choque.

Trataba de mover sus fichas Monge, que veía como la diferencia se disparaba hasta llegar casi a la veintena (64-45). Seis puntos consecutivos sin réplica local, con cuatro de Vindel, permitían a Ibaizabal reducir diferencias y obligar a Álvaro Fernández a solicitar tiempo muerto de cara al minuto y medio final para controlar el partido y lograr así la primera victoria para las gallegas.

Las nuestras disputarán la segunda jornada de liga debutando como locales, enfrentándose el sábado 12 de octubre al Talenom Boet Mataró.

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